Tras su primer viaje a París, en septiembre de 1900, acompañado de su amigo el pintor Carlos Casagemas, que se suicidará en la capital francesa en febrero de 1901 tras haber pasado juntos el cambio de siglo en Málaga, en Picasso se iniciará la época azul, conmovido por el trágico destino de su amigo y transformado por la dura vivencia de la bohemia más hambrienta en sus sucesivos retornos a la Ciudad Luz.

Afincado allí de forma permanente desde 1904, en ese año va llegando a su fin la época azul para dar inicio a la época rosa. Instalado en Montmartre en el destartalado edificio conocido como Bateau-Lavoir, “Barco Lavadero”, conoce allí a Fernande Olivier, que será su compañera hasta 1912. Son sus grandes amigos de esos años los poetas Guillaume Apollinaire, André Salmon y Max Jacob. Y su fuente de inspiración el circo Medrano, que frecuenta con asiduidad.

Todo ese ambiente se irá manifestando en su primera serie de grabados, conocida como Suite de los Saltimbanquis, que la Fundación Picasso muestra gracias a la Fundación Málaga, que los adquirió para dejarlos en depósito desde 2005. Una pieza fundamental para conocer y disfrutar al Picasso de aquellos años difíciles y heroicos.